Antes de trabajar con Mónica me sentía con ansiedad, triste y sin energía. Me preocupaban muchos asuntos en mi vida: no conocerme realmente a mí misma, no encontrar a ninguna persona con la que encajar, no aceptar la realidad… Empecé un proceso de terapia y gracias a él empecé a sentirme con más energía, a tener un  mejor control de la ansiedad y de las situaciones de estrés, y a tener más comprensión hacia mí misma. Eso se refleja en mi día a día con más tranquilidad y paz a pesar del malestar. Eternamente agradecida por tu ayuda, Mónica. Gracias.

Llevaba un tiempo atrapado en una especie de bloqueo que se reflejaba en falta de energía, períodos de tristeza y somatizaciones.
Lo cierto es que tenía falta de esperanza y cierta apatía. Tras trabajar con Mónica me siento mucho más confiado, y también identifico y me relaciono de una forma más abierta con mis sombras. Esto me ayuda a comprenderme y cuidarme. Soy capaz de tomar conciencia de mis funcionamientos interiores y del poder del "ser", también de la acogida incondicional. Ahora vivo con mayor paz, más gusto por las cosas que hago, estando menos tiempo enganchado a lo mental. Gracias por la entrega, la acogida y el respeto a mi proceso. 

Llegó un momento en mi vida en el que me sentía tan desconectada de mi cuerpo y mi ser interior que necesitaba un cambio. Un cambio que me llevara a tener mayor conciencia de mi interior y con el que poder aumentar mi amor propio. Trabajando con Mónica aprendí a cuidar de mí misma, acercarme a mis emociones y a explorar mi mundo interior. Lo que más me gusta es la sensación de ligereza, alegría y confianza en mí misma que siento ahora. Gracias Mónica por enseñarme a confiar en mi instinto y a explorar las habilidades que ya tengo
para hacer frente a todo lo que se me presente en la vida.